Por: Q.F.B. Cristian Alonso Galindo Martínez
La conocida enfermedad de la hepatitis es definida como una inflamación considerable del hígado, de la cual, se pueden derivar diferentes signos y síntomas muy representativos en las personas que padecen dicha enfermedad. Esta enfermedad ha tenido una creciente presencia y prevalencia en México debido a condiciones sanitarias o sociales en el país, por lo que es de importancia conocer su origen, causas y algunos tratamientos.
Origen y transmisión de la hepatitis
La hepatitis puede tener diferentes causas u orígenes dependiendo de la persona, pudiendo presentarse por infecciones virales, bacterianas, por enfermedades autoinmunes, o inclusive por traumatismos en la zona del hígado. Al ser los virus de la hepatitis una de las formas de contagio de la enfermedad, también se puede considerar una enfermedad de transmisión sexual (ETS), ya que se transmite también al tener relaciones sexuales con una persona infectada.
Otras formas de transmisión generalmente son por agua, bebidas o alimentos contaminados que no fueron procesados adecuadamente, o simplemente por la interacción con sitios insalubres contaminados.
La enfermedad de la Hepatitis puede generar molestos síntomas a las personas infectadas, tales como: molestias gastrointestinales, diarrea, vómito, fiebre, dolor abdominal o muscular, pérdida de peso, entre otros. Sin embargo, el síntoma más característico es la ictericia, un cambio de color en la piel y ojos de la persona por la bilirrubina, un pigmento del cuerpo que eleva sus niveles en la enfermedad.
Tipos de hepatitis viral y a quién afecta
La causa más común de la enfermedad es debida a los llamados Virus de la Hepatitis de los que se conocen 5 tipos principales: A, B, C, D y E, teniendo diferencias en sus síntomas, detección y tratamiento, pero causando un daño común.
Mientras la Hepatitis A y E se contagian fácilmente por alimentos, siendo por esta razón las más comunes en niños, la Hepatitis B, C y D se contagian con mayor facilidad por la sangre de las personas, afectando con mayor frecuencia a adolescentes y adultos.
Detección Genotipificación en laboratorio
Una de las primeras acciones recomendadas por médicos y organismos de salud ante esta enfermedad, es hacer un diagnóstico oportuno por medio de análisis de laboratorio. El laboratorio AL GENÓS cuenta con equipo altamente especializado para la detección y tipificación del virus de la hepatitis por técnicas como la PCR, identificando si existe la infección y clasificando el tipo de virus del que se trata. Estas pruebas brindan confianza en la detección específica y por tanto permitirá recibir el mejor tratamiento para el paciente.
“Un diagnóstico oportuno marca la diferencia”.